CON LA PASEATA DEL CABILDO INDIGENAL DE SAN JOSÉ DE CHIQUITOS, EL PUEBLO NATIVO INICIÓ LOS FESTEJOS CONMEMORATIVOS A LOS 450 AÑOS.
Este jueves 24, la comunidad originaria de San José de Chiquitos, desde muy temprano se reunieron en la Casa de Bastón, para preparar la tradicional Paseata, actividad con la cual los originarios anuncian cada festividad. Encabezados por sus autoridades chiquitanas los pueblos Ramanukas y Piococaxh, realizan un recorrido por el centro histórico de San José, mientras los músicos de ambas tribus, ejecutan ritmos de la zona con cajas y flautas.
Los característicos paichichices de los abuelos, semillas que son atados a la altura de las canillas, cuelgan y hacen sonido al bailar, al compás de las cajas, llamando fácilmente la atención. En esta oportunidad, la paseata concluyó en las puertas de la H. Alcaldía Municipal donde su principal autoridad, el Dr. Germaín Caballero Vargas, los recibió portando el bastón de mando que el mismo pueblo originario le entregara en ocasión de su posesión como alcalde.
Caballero, quien se encontraba flanqueado por las concejalas miembros de la comisión de gestión social y de la reina del carnaval josesano, que a la vez es reina de los 450 años de la fundación de Santa Cruz de la Sierra, respondió a las palabras que le dirigiera el cacique mayor, don Juan Casupá, autorizando el inicio de los festejos. Con palabras en bésiro o dialecto chiquitano dijo "Chapieé Saruqui (gracias hermanos), estos 450 años de encuentro entre dos mundos, entre nuestros antepasados y los extremeños españoles, fue la génesis de una historia cargada de logros, tal como nuestra consagración como pueblo más progresista de Bolivia”, subrayó Caballero, a la vez que remarcaba la importancia del aporte del hombre chiquitano a la formación de la sociedad cruceña antes, durante y después de su fundación.
Para este 25 se tiene programado el encuentro de cabildos originarios de toda la zona chiquitana, a la cual ya han confirmado su participación los cabildos originarios de Santiago de Chiquitos, San Rafael, San Miguel, Santa Ana y San Ignacio de Velasco; Concepción, San Antonio de Lomeríos y San Javier.
Este jueves 24, la comunidad originaria de San José de Chiquitos, desde muy temprano se reunieron en la Casa de Bastón, para preparar la tradicional Paseata, actividad con la cual los originarios anuncian cada festividad. Encabezados por sus autoridades chiquitanas los pueblos Ramanukas y Piococaxh, realizan un recorrido por el centro histórico de San José, mientras los músicos de ambas tribus, ejecutan ritmos de la zona con cajas y flautas.Los característicos paichichices de los abuelos, semillas que son atados a la altura de las canillas, cuelgan y hacen sonido al bailar, al compás de las cajas, llamando fácilmente la atención. En esta oportunidad, la paseata concluyó en las puertas de la H. Alcaldía Municipal donde su principal autoridad, el Dr. Germaín Caballero Vargas, los recibió portando el bastón de mando que el mismo pueblo originario le entregara en ocasión de su posesión como alcalde.
Caballero, quien se encontraba flanqueado por las concejalas miembros de la comisión de gestión social y de la reina del carnaval josesano, que a la vez es reina de los 450 años de la fundación de Santa Cruz de la Sierra, respondió a las palabras que le dirigiera el cacique mayor, don Juan Casupá, autorizando el inicio de los festejos. Con palabras en bésiro o dialecto chiquitano dijo "Chapieé Saruqui (gracias hermanos), estos 450 años de encuentro entre dos mundos, entre nuestros antepasados y los extremeños españoles, fue la génesis de una historia cargada de logros, tal como nuestra consagración como pueblo más progresista de Bolivia”, subrayó Caballero, a la vez que remarcaba la importancia del aporte del hombre chiquitano a la formación de la sociedad cruceña antes, durante y después de su fundación.Para este 25 se tiene programado el encuentro de cabildos originarios de toda la zona chiquitana, a la cual ya han confirmado su participación los cabildos originarios de Santiago de Chiquitos, San Rafael, San Miguel, Santa Ana y San Ignacio de Velasco; Concepción, San Antonio de Lomeríos y San Javier.
