miércoles, 16 de diciembre de 2009

Pozo del Cura celebró la festividad de su patrona protectora


La festividad religiosa, Concepción de la Virgen María, Pura y Sin Manchas, es una fecha importante para los vecinos de la Comunidad Pozo del Cura, quienes cada 8 de diciembre la celebran con mucha solemnidad.
Cada año, los rituales y ceremonias que son tradicionales para las comunidades trillizas, denominadas así a, Candelaria, Quituquiña y Pozo del Cura, por la cercanía que hay unas de otras y por la similitud en sus celebraciones patronales. Esta última anfitriona de los muchos posokas que llegaron a celebrar el aniversario de la tierra de los cítricos.
Las autoridades municipales fueron invitados especiales a esta tradicional celebración y como regalo, el Alcalde Municipal realizó la entrega de un parque infantil para los niños de la Unidad Educativa.
Quienes llegaron a Pozo del Cura, población que cuenta con 12 familias y distante a 18 Km. al norte de la Urbe Josesana, se congregaron, en la Capilla y el Galpón Comunal, para formar parte de las celebraciones religiosas, sociales y actos protocolares.
El parque viene a alegrar la vida de los niños de la comunidad y se convierte en un hermoso regalo para los pobladores de Pozo del Cura, que todos los años reciben un regalo del Gobierno Municipal, especialmente en la fecha de su aniversario, dijo el cacique de la comunidad. “Con nuestro nuevo galpón comunal, la escuela, la red domiciliaria de agua y los proyectos de desarrollo productivo implementados hasta la fecha, la comunidad ha vuelto a tener vida” aseguró.
Una solicitud que hicieran los pobladores de Pozo del cura, Quituquiña y Candelaria, con la finalidad de cubrir una sentida necesidad, es la de suministro de energía eléctrica, a la cual el alcalde Municipal ofreció interponer sus buenos oficios para que este sueño muy pronto se convierta en realidad. “Todo lo que se ha logrado hasta el momento en barrios y comunidades del Municipio Josesano, primero lo hemos soñado y desde la Alcaldía hemos trabajado en coordinación con todos los dirigentes y autoridades para hacer de esos sueños una realidad” afirmó Germaín Caballero, Alcalde Municipal de San José de Chiquitos.
Los actos que se iniciaron con el velorio en la víspera, el descuelgue al amanecer, la celebración de la Santa Misa, y posterior corte de cinta en el parque infantil; continuó con el destape del cántaro de chicha, la bendición de la comida y el ofrecimiento de la comida a los posokas, tradición que ha sido legada por los abuelos y transmitida de generación en generación.
Una particularidad que se vive en estas tierras es el ofrecimiento de la comida que hacen las 12 familias asentadas en el lugar, a los posokas que llegan a compartir su alegría con los amables comunarios.
Sentados en la mesa, el papá y la mamá de cada familia reciben los 12 platos de comida ofrecidos por los anfitriones, preparada a base de chancho, pato, tatú, urina o anta. El motivo por el cual se ofrece esa cantidad de comida, es porque desde las comunidades vecinas llegan las familias entera a dar riendas sueltas a la alegría por un año más de vida de la población. Los posokas almacenan la comida, en bolsas u ollas para luego compartirlo con los hijos, en el lugar donde se encuentran alojados.
Del mismo modo se comparte la bebida al compás de la tamborita que alegra la tradicional fiesta Chiquitana.
Felicidades vecinos de Pozo del Cura
La mamita de Cotoca derrame a raudales su bendicion.

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